Estamos acostumbrados a recurrir a tratamientos antienvejecimiento una vez ya aparecidas las primeras arrugas en nuestra piel. No tenemos en cuenta que existen muchos otros factores que influyen en el grado de envejecimiento de nuestra dermis, así como en el grado de efectividad que se puede conseguir con los tratamientos estéticos.
Hoy vamos a daros 5 pequeños consejos que os ayudarán a mantener durante más tiempo una piel saludable y que retrasarán la aparición de arrugas prematuras.
La importancia del agua
Mantente hidratada. Por todos es sabido que el cuerpo humano cuerpo está formado en su mayoría por agua. La piel en especial hace uso de H2O para nutrirse y mantenerse con un aspecto saludable. Por lo que debemos consumir un mínimo de 2 litros de agua al día.
Un consejo para quien le cueste llegar a la cantidad de agua recomendada es consumirla por medio de infusión o té. De está forma se nos hará menos dificil la ingesta.
No solo debemos pensar en el agua como nutriente para consumo oral, ya que también es muy beneficiosa cuando se aplica en el exterior de la piel. El agua fría por ejemplo ayuda a mejorar el tono cutáneo y a cerrar los poros. Para estimular la circulación puede aplicarse agua caliente. De esta manera se dilatan los capilares.
¡Deja de fumar!
Por todos son conocidas las graves consecuencias que el tabaco tiene en nuestra salud pudiendo producir desde problemas cardiovasculares hasta cáncer de pulmón. Pero otro de los efectos adversos del tabaco, más concretamente de la nicotina, es que altera la generación de elastina y colágeno en la dermis, lo cual provoca un envejecimiento prematuro de la piel, que además tiende a perder su aspecto brillante y natural.
Los vegetales y la fruta ayudan a mantener una piel más saludable
El consumo de este tipo de alimentos ayuda a mejorar el color de piel. Diversos estudios han demostrado que las verduras y frutas como el tomate, el rábano, la manzana o las fresas contienen unos pigmentos vegetales llamados carotenoides que otorgan una tez con un aspecto mucho más radiante y saludable. Además están llenos de antioxidantes que retrasan su envejecimiento.
Reduce el consumo de alcohol
El alcohol es uno de los factores que más afecta a nuestra piel. Si en el primer punto comentábamos que debemos consumir mucha agua para mantenernos bien hidratados, el alcohol consigue todo lo contrario. Hace que nuestro cuerpo pierda su hidratación más rápidamente, provocando sequedad dérmica.
Otra consecuencia del consumo excesivo de alcohol es que afecta de forma directa a la Vitamina A que alberga nuestra piel. Acelerando la aparición de los signos de la edad.
Utiliza un protector solar adecuado
A todos nos gusta lucir una piel bronceada, pero no podemos olvidar que los rayos solares son los primeros causantes del envejecimiento de la piel. Por eso debemos protegerla con cremas con una factor de protección acorde a nuestra piel que evitará la erosión prematura de la dermis, además de una sequedad para nada beneficiosa.
Si conoces algún secreto que ayude a mantener una piel sin arrugas, no dudes en contárnoslo.